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Butiá, robótica 100% uruguaya

El proyecto Butiá es una iniciativa de docentes de la Facultad de Ingeniería de la Udelar que tiene como objetivo la creación de una plataforma simple y económica capaz de permitir a estudiantes y docentes de secundaria, primaria y UTU interiorizarse con las ideas básicas de la programación en robots. Andrés Aguirre, docente de la Facultad de Ingeniería e integrante del proyecto Butiá ofreció al Área de Comunicación más detalles sobre este proyecto que nace en el 2006 y se extiende hasta la actualidad.


Inicios del proyecto

La idea del proyecto nació en el 2006 y buscaba sensibilizar y acercar la robótica a la sociedad, utilizándola como una herramienta motivacional en la enseñanza secundaria y primaria.

Ese año se crearon las primeras versiones de robots, la mayoría compuestos por piezas recicladas y algunos componentes esenciales traídos desde el exterior.

“Cuando empezamos a idear Butiá resolvimos que tenia que ser un proyecto económico con alternativas a materiales reciclados que se pudieran encontrar en todos lados y hacer en cualquier parte”, relata Aguirre.

A partir de 2007, con la creación de Plan Ceibal, se abrió una oportunidad para el grupo. “Cuando empezamos con el proyecto y vimos la gran cantidad de XO en manos de los niños, se nos ocurrió usar su hardware y software para armar el Butiá”. A partir de ese momento la “ceibalita” se convirtió en el corazón de todas las versiones posteriores.

El comienzo formal del emprendimiento fue en el 2009, cuando a través de la ANII (Agencia Nacional de Investigación e Innovación) se obtuvo la financiación del proyecto por un año.

Aguirre agrega: “Cuando comenzamos no pensamos estar tanto tiempo con el Butiá, afortunadamente llevamos 7 años de trabajo y varias versiones del robot”.

El Butiá
El robot utilizado actualmente en el proyecto es la versión 2.0 de la plataforma robótica Butiá, que ha evolucionado y complementado con el fin de bajar los costos de ensamblaje, permitiendo además una mayor versatilidad al momento de introducir cambios y sumar esfuerzos.

El robot puede ser construido íntegramente de manera casera -esa es una de las premisas de su diseño- y para ello se cuenta con instructivos, software y ayudas en la página del grupo. http://www.fing.edu.uy/inco/proyectos/butia/

 

Experiencias con estudiantes
Cada escuela y cada liceo con los que se ha trabajado deja al grupo una infinidad de historias y vivencias para recordar. “La experiencia con los estudiantes es increíble y muchos hicieron de este proyecto algo propio. Trabajan en su robot, intentan que haga cosas nuevas y participan de las competencias anuales que realizamos. Es muy gratificante ver ese compromiso”.

Un historia muy particular se dió con un grupo de estudiantes del departamento de Durazno. Ellos se interesaron en el proyecto, bajaron de nuestra página web el instructivo y comenzaron a armar su propio robot Butiá. Lograron crear una versión única con con piezas alternativas y recicladas que encontraron en su pueblo, incluso hicieron una plataforma de chapa”.

Las aplicaciones del robot en las aulas no tiene límites, Aguirre nos cuenta que “hay docentes que utilizan el robot para enseñar otras cosas. Por ejemplo en una escuela simularon los efectos de la contaminación lumínica en el hábitat del murciélago. Para ello utilizaron varias luces para 'confundir' al robot”.

Trabajo y perspectivas
Con el correr de los años el proyecto creció notoriamente. Hoy en día hay una gran proliferación de herramientas robóticas en los centros educativos públicos y privados, de modo que se busca capacitar a los docentes para que puedan encontrar en la robótica una herramienta útil en el aprendizaje.

Actualmente el grupo trabaja en coordinación con el Proyecto ProCiencia de la ANEP. Allí se hace un trabajo de taller con los docentes, enseñándoles programación, formándolos y facilitando la búsqueda de aplicaciones.

Andrés Aguirre destacó la participación y el compromiso de Antel con este proyecto, ya que gracias a su apoyo pudieron seguir adelante, crear una nueva versión del robot y cumplir con los objetivos planteados. Hoy en día se hacen talleres con escuelas y liceos todos los martes en la Torre de las Telecomunicaciones de Antel.

Para el próximo año se espera continuar con los trabajos con docentes y estudiantes, seguir contribuyendo con el desarrollo de la robótica y tener terminada una nueva versión del robot.